STARGATE
STARGATE EE. UU., 1994
Título original: Stargate
Dirección: Roland Emmerich
Guión: Dean Devlin
Producción: Dean Devlin, Oliver Eberle
Música: David Arnold
Fotografía: Karl Walter Lindenlaub
Duración: 116 min.
IMDb:
Reparto: Kurt Russell (Coronel Jonathan «Jack» O´Neil); James Spader (Dr. Daniel Jackson); Viveca Lindfors (Catherine Langford); Alexis Cruz (Skaara); Mili Avital (Sha´uri); Leon Rippy (General West); John Diehl (Kawalsky); Carlos Lauchu (Anubis); Djimon Hounsou (Horus); Erick Avari (Kasuf); French Stewart (Ferretti); Gianin Loffler (Nabeh); Jaye Davidson (Ra)

Comentarios de: Pedro García, Jesús Moya

Un egiptólogo acaba de descubrir el secreto para poder usar una especie de portal estelar encontrado en Egipto en la década de los 20. El portal lleva hasta a un planeta desconocido que se encuentra a años luz de la Tierra. Para explorarlo se envía a un grupo de tropas americanas y al egiptólogo, pero al llegar se encuentran con un gran problema: no hay manera de volver a abrir al portal sin el equipo adecuado, que por supuesto, no tienen en esos momentos.

Para poder regresar sanos y salvos, deberán combatir a las fuerzas del mal que se encuentran el planeta y salvar a la Tierra de una gran amenaza explosiva.

© Pedro García,
(112 palabras) Créditos

Sinopsis

1928. Gizeh, Egipto. Un grupo de trabajadores a las órdenes de un arqueólogo desentierran unas tumbas, encontrando debajo de ellas un enorme objeto circular construido de un extraño metal, y rodeado de inscripciones desconocidas.

Varias décadas después, en 1994, el egiptólogo Daniel Jackson ve su salvación económica al ser contratado por el gobierno norteamericano para descifrar jeroglíficos del Antiguo Egipto.

En el interior de una instalación secreta bajo tierra, en Colorado, comienza a trabajar sobre un conjunto de 7 signos, descubriendo que lejos de ser cualquier clase de escritura antigua egipcia, son realmente dibujos de constelaciones, que representan un punto de partida y las coordenadas de un destino.

Así, finalmente le enseñan el objeto que guardan en la instalación y sobre el que están grabados los símbolos que ha traducido: el extraño artefacto circular hallado en Gizeh en 1928, y que es realmente una puerta estelar, un sistema de teleportación entre universos que puede permitir el contacto entre dos mundos.

Dado lo peligroso del descubrimiento, es enviado en la primera misión exploratoria a un comando militar bajo el mando del coronel Jack ONeil, al que se agrega en el último momento el propio egiptólogo Daniel Jackson, en calidad de lingüista.

Si a un argumento de ciencia-ficción original, le añadimos una buena dosis de aventuras en un escenario exótico y además con militares, lo que obtenemos es un peliculón. Y esto es lo que es STARGATE: PUERTA A LAS ESTRELLAS.

Dirigida en 1994 por Roland Emmerich, un director alemán que entre otras cosas, está casi especializado en películas de ciencia-ficción. Si dejamos de lado uno de sus filmes, EL PATRIOTA (con Mel Gibson), el resto de su filmografía pertenece a este género.

Y decimos entre otras cosas porque también es guionista de casi todas ellas.

La idea de STARGATE la concibió ya en 1979, cuando era alumno en la Escuela de Cine de Munich, en su Alemania natal. Aunque el guión definitivo de la película es obra suya y de Dean Devlin, guionista y productor norteamericano que ha colaborado con él en casi todas.

El argumento está construido en torno a la puerta estelar, nombre con el que aparece un fenómeno de física teórica conocido como agujero de gusano, especie de túnel del espacio por el que sería posible desplazarse entre dos puntos lejanos acortando infinitamente las distancias. Aunque este agujero aparece con una física más elaborada y más real en los guiones de otras películas del género (STAR TREK: LA PELÍCULA y sobre todo CONTACT), en STARGATE adopta su forma más sencilla; pero a pesar de ello hace la película fascinante.

El hallazgo al otro lado de la puerta estelar de otro planeta con una cultura igual a la egipcia de hace 3000 años, llevada allí por este medio por una inteligencia extraterrestre que también la domina, crea un escenario de aventuras recreado con una luminosidad, unos efectos especiales y unos decorados majestuosos unidos a una ingente cantidad de personajes (se llegaron a utilizar a muchos maniquíes, dado que resultaban más baratos que los extras) a los que se les une una banda sonora soberbia que todavía realza más la historia.

Para esta banda sonora se quería contar con John Williams (LA GUERRA DE LAS GALAXIAS y muchas otras), pero a raíz de escuchar algunos de los temas compuestos por David Arnold, que impresionaron por su calidad, finalmente se hizo cargo éste de la música. Esta era su segunda película, y en estos últimos años, David Arnold ha sido el autor de algunas de las bandas de James Bond.

Cuando se comenzó su rodaje, Dean Devlin y Roland Emmerich tenían planeado que STARGATE: PUERTA A LAS ESTRELLAS fuera la primera de una serie de producciones del mismo tipo y parecido argumento, pero posteriormente abandonaron la idea para dedicarse de lleno a otras películas (INDEPENDENCE DAY, GODZILLA, etc).

La idea de la puerta estelar ha dado mucho de sí y esto ha hecho que haya surgido todo un universo STARGATE y que hayan habido varias secuelas de la película en forma de novelas, tres series de televisión y una de dibujos animados, todas basándose en la misma historia pero con personajes y guiones totalmente diferentes, con las que Devlin y Emmerich no han tenido relación ni influencia alguna.

En televisión estas series han sido a lo largo de bastantes años auténticos éxitos de audiencia, pero han dejado ya de producirse todas.

Estas series son Stargate SG-1, de sobra conocida en España, pues creo que todavía van cayendo por ahí algunos capítulos en alguna cadena (la interpretada por el McGiver); Stargate Atlantis, que también se ha emitido en nuestro país; y finalmente otra serie llamada Stargate Infinity, de dibujos animados, que no sé si se ha programado aquí, y la última, Stargate Universe.

Stargate SG-1 trata de los viajes de un grupo del Ejército norteamericano a través de una puerta estelar. Por contra, Stargate Atlantis está centrada en un grupo de humanos ubicados en un planeta de la galaxia Pegaso, a donde han llegado por medio de otra puerta.

He visto algunos episodios de SG-1, y sin dudar de la calidad de los personajes y de las historias, evidentemente no son lo mismo. Aunque hay mucha gente que ha seguido las series gustándoles más que la película original.

Creo que una de las razones que hace verdadero el dicho de que segundas partes nunca fueron buenas, cuando se hacen continuaciones de películas míticas, es que algunos o todos los actores sean diferentes a la entrega original.

Si hay aficionados que compartan esta opinión, y en particular en relación a STARGATE: PUERTA A LAS ESTRELLAS, aquí va una buena noticia: Devlin y Emmerich están ya trabajando en dos nuevas entregas del STARGATE original, con los mismos actores (Kurt Russell y James Spader), y también dirigidas por Emmerich. Posiblemente se trate de las películas que quisieron hacer en su día, cuando montaban la Puerta a las estrellas original. Si es así, dentro de poco tendremos dos nuevos peliculones para ver (2021-06-21 Lamentablemente, esto quedó solo en un rumor, que vuelve de forma recurrente).

Finalmente, diremos que STARGATE: PUERTA A LAS ESTRELLAS ha sido ferozmente criticada de todas las formas y con todos los nombres imaginables.

De ella se ha dicho que no vale nada; que en su argumento aparecen disfrazados tópicos tan americanos como el de una fuerza de intervención que lucha por derribar al tirano que oprime al país subdesarrollado, etc., etc.

También se ha dicho, y muchas veces, que el tema del film es muy bueno pero que tan sólo aparece excelentemente planteado y desarrollado al principio, pero se cae degenerando el argumento en unas simples batallitas sin interés ni emoción en cuanto el comando militar se introduce en la puerta estelar.

Se diga lo que se diga, quizá tengan bastante razón; creo que muchos lo harán más por el desaprovechamiento de la idea para hacer un superpeliculón que por otra cosa. Pero no olvidemos que una película de esta clase no es para plantear enigmas, sino para entrenetener. Con todo, vale la pena verla.

Nuestra valoración: 8, 9 puntos.

© Jesús Moya, (985 palabras) Créditos Créditos
Publicado originalmente en AluCine el 15 de noviembre de 2010