AKIRA
AKIRA Japón, 1988
Título original: Akira
Dirección: Katsuhiro Otomo
Guión: Izo Hashimoto
Producción: Haruyo Kanesaku, Shunzo Kato
Música: Shoji Yamashiro
Fotografía: Katsuji Misawa
Duración: 124 min.
IMDb:
Reparto: (voces) Mitsuo Iwata (Shotaro Kaneda); Nozomu Sasaki (Tetsuo Shima); Mami Koyama (Kei); Tesshô Genda (Ryusaku); Hiroshi Ôtake (Nezu); Kôichi Kitamura (Miyako); Michihiro Ikemizu (Inspector); Yuriko Fuchizaki (Kaori); Masaaki Ôkura (Yamagata); Tarô Arakawa (Eiichi Watanabe); Takeshi Kusao (Kai); Kazumi Tanaka (Army)
Comentarios de: Félix Capitán

¿De qué se trata?

1988. Tokio se ve una linda y bonita ciudad, y de pronto, ¡ups! alguien deja la llave de la energía abierta, la ciudad se inunda de una bonita burbuja blanca, y toda ella es arrasada hasta los cimientos. 2019. Neo Tokio es una ciudad azotada por las pandillas, la criminalidad, etcétera. La pandilla de Kaneda se ve metida en un lío con otra pandilla, nada del otro jueves, pero todo acaba cuando uno de sus pandilleros, Tetsuo, es secuestrado en helicóptero por un misterioso grupo de agentes. Kaneda empieza entonces a moverse para rescatar a Tetsuo, porque aunque era el imbécil del grupo, sigue siendo SU imbécil, así es que lo traerá de regreso a cómo dé lugar. Pero Tetsuo tiene otros planes. En medio de todo esto, y por un, ejem, infinitesimal error de cálculo por parte de un científico, Tetsuo descubre que puede desarrollar superpoderes. Ahora, Tetsuo no le debe nada a Kaneda, no se dejará rescatar, y en verdad, se va a vengar de todo el mundo que lo humilló y despreció. La única posibilidad para detener a Tetsuo es desatar a alguien que podría ser incluso peor: el misterioso Akira, oculto en alguna parte, y muy esperado tanto por el Gobierno como por grupos fanáticos fundamentalistas que están llamándolo como al mesías... Pero, ¿qué relación tienen Akira y el Gobierno con el accidente que destruyó a Tokio, 31 años antes...?

El espíritu de los tiempos

La década de los 80s vio el desarrollo ultraacelerado de las computadoras, que dejaron de ser artefactos empotrados en las paredes, funcionando con aparatosas cintas magnéticas, para invadir los escritorios y mobiliario de todo el mundo. La respuesta fue el cyberpunk, género literario que versa sobre la deshumanización del hombre, la desintegración de la sociedad occidental, la maquinización del cuerpo humano, etcétera, y que tiene ejemplos canónicos en BLADE RUNNER, TERMINATOR, EL HOMBRE DEL JARDÍN, MÁTRIX, EL QUINTO ELEMENTO, y un largo (y no pocas veces fastidioso) etcétera. Por supuesto que los japoneses se plegaron a la moda, y lanzaron unas cuantas (AKIRA, TETSUO, EVANGELION, etcétera) AKIRA es considerado un clásico dentro del cyberpunk, aunque en estricto rigor, de cyberpunk tiene apenas algo más que la pura fachada, porque primero poco a poco, y descaradamente en la segunda mitad, deviene en misticismo Dragonball´s style, pero en fin.

¿Por qué verla?

:: Por su condición de clásico, en primer lugar. AKIRA presenta una de las visiones más perfectas y acabadas de lo que se supone es el universo cyberpunk, incluyendo pandillas y tribus callejeras, gobiernos desmoronándose, experimentos científicos con la esencia de la carne humana, etcétera. Esta iconografía canónica la hace única en su tipo.

:: El trabajo de animación. Desluce un tanto en la actualidad, considerando que para su tiempo el nivel de detalle era revolucionario, pero aún así, la animación se ve fluida y no encorsetada. Es decir, no tratan de recurrir al sucio truco japonés de ahorrarse horas/hombre de dibujantes esclavos, montando largas y detenidas secuencias con un mismo cuadrito prologándose varios segundos cada vez. Acá, cada fotograma es como la vida: único, original e irrepetible.

:: Los personajes. En general no se puede hablar de buenos y malos: simplemente son distintos protagonistas que se mueven por algo más que el bien y el mal, que no terminan de alinearse a un lado u otro de la refriega, y que tratan de hacer por lo general, lo mejor posible, con lo que tienen. Y eso incluye tanto a Tetsuo, el villano oficial, pero que se nos presenta como un resentido bien explicado, a sus amiguetes, a los funcionarios del Gobierno, etcétera.

:: La mala leche. Esta película presenta algunos guiños y críticas entre líneas que están entre lo más venenoso que se podría encontrar en materia de dibus animados. El retrato del gobierno como una panda de ineficientes salvaculopropios, y de los militares que resuelven los problemas con el método hipopótamo en cristalería es directo a la vena. Y Tetsuo, cuando se vuelve oficialmente un superpoderoso y empieza a hacer gala de sus superpoderes aniquilando cuanta cosa se le pone a su alcance, se pone una capita roja muy reminiscente de aquella que usa cierto superhéroe metropolitano yanki, para salvar a la Humanidad... Y es impagable la escena en la que los fanáticos de la religión de Akira confunden a Tetsuo con su mesías largamente esperado, como los cristianos al Anticristo en el Apocalipsis, y por ende, sufrirán las consecuencias, y eso bien duro.

:: Respecto del ritmo, pues bien... ¿qué decir...? La primera mitad de la película es trepidante, eso sin lugar a dudas. La segunda, en cambio, degenera en el Síndrome Caballeros del Zodíaco, con una pelea interminable y con muchos efectos visuales gratuitos para acompañar las machadas sin sentido de Tetsuo.

Ideal para: Ver un clásico cyberpunk (en particular la primera mitad)

© Félix Capitán, (795 palabras) Créditos
Publicado originalmente en Cine 9009 el 20 de diciembre de 2006