Entre todos los superhéroes inventados por los guionistas de la Marvel posiblemente Spider-man es el más emblemático. De hecho no hay ninguna duda que los tres más leídos y conocidos son Superman (1938), Batman (1939) y Spider-man (1962) como parecen confirmar sus numerosas adaptaciones para el cine.
Peter Parker, un estudiante tímido y huérfano desde los seis años, que vive con sus tíos, es mordido por una araña radioactiva. Seguramente a cualquier otro esto le habría producido un cáncer pero a Peter le otorga los poderes propios de los arácnidos. Cuando encuentra muerto a su tío, que ha sido asesinado por unos malhechores decide dedicar su vida a combatir el mal bajo el nombre y el disfraz de Spider-man. En esta lucha se enfrentará a malvados tan peligrosos como Electro, el Dr. Octupus, el Camaleón y se casará con la atractiva Mary-Jane Watson-Parker.
Sin embargo Spider-man es un superhéroe algo distinto: es un defensor de la ley paradójicamente perseguido por la policía, tiene dificultades para pagar el alquiler del piso donde vive, cuando fácilmente podría ser un millonario como Batman, soporta sus superpoderes como una especie de maldición que le impide tener una vida normal y se muestra psicológicamente aplastado por el peso de su responsabilidad. Peter es capaz de descubrir su verdadera personalidad a un niño condenado a muerte por estar enfermo de leucemia.
Un año después de su aparición en el número 15 de la revista Amazing Fantasy, ya tenia su propia revista Amazing Spider-man. Spider-man ha sido dibujado por muchos artistas: Sal Buscema, Gil Kane, John Romita Jr., Al Williamson, Mike Esposito, Keith Williams o Joe Rubistein entre otros lo que implica que sus aventuras tiene altibajos de calidad. En España ha sido editado siempre en cuadernos y, actualmente, lo está haciendo Planeta Agostini.